Pregúntale a Draconifors

Una trampa.

Entra en esa habitación oscura, dijeron, Gokudera y Tsunayoshi se lo están montando dentro, dijeron. Mentira. No había nadie en esa habitación, en realidad, ni ningún interruptor o similar para encender una luz en medio de esa densa oscuridad. Le daba escalofríos. Encontró de nuevo la puerta y la aporreó, pero no pudo abrirla. Mal rollo. Cuando se cansó, se sentó en el suelo y sacó su móvil para ver por enésima vez los capítulos de una serie yaoi. Para pasar el rato, entre que pudiera salir.

De pronto, una lámpara se encendió en el techo, revelando en medio de la sala una mesa con una silla el lado. Parpadeó, sorprendida, y se levantó para sentarse ahí.

- ¿Hoola? ¿Hay alguien?

User: ¿Crees que Tsunayoshi podría joderse a Gokudera sin usar alguna artimañana de mierda rara?

-Uy, hola -saludó con la mano cuando la chica entró-. ¿Esto es como una entrevista o algo así? ¡Me gusta! -asintió con la cabeza, complacida con la pregunta, y luego se llevó la mano al mentón, pensativa-. Bueno, ese es un tema delicado... Gokudera-san es el perrito de Tsunayoshi, no cabe duda de que incluso se dejaría ukear, pero... ahora mismo Tsunayoshi no está en condiciones de tirarse a nadie, ¿entiendes lo que quiero decir? Demasiado ukazo, digamos. Sin embargo... es cuestión de esperar un tiempo. En unos años terminará seguro siendo un mafioso imponente y, por tanto, podrá ser seme de Gokudera-san si quiere -sonrió alegre, como si no estuviera hablando de su futuro capo.

-¡Draco!- La user se acerca caminando encorvada con las manos en las bolsas de sus pantalones, como una Gokudera cualquiera -Siempre le dices cosas adorables a Naito- Dice sonriendo enternecida por esas supuestas casas adorables -¿Quien dices que debería tener el "honor" de violarlo? Por que... No se si sabrás pero aun es virgen- Sonrie cómplice y pornosa