[RETO] El capitán de fútbol es un maid [ft. Sean]

Situación: Trabajo, actividades del festival
Objetivo: Recaudar dinero para la clase
Lugar: Colegio Namimori
Hora: 9:30 a.m

- Que putada -podía ver felizmente a su hermana revolotear en su clase, vendiendo bananas con chocolate, mientras él, ÉL tenía que vestirse como maid, si, un chico, vestido de chica, con esos vestidos con detalles y ..bueno, es un vestido al final, cosa que jamás pensó usar en su vida de macho.

El asunto era el siguiente, la maldita presidenta de su clase era una puta fangirl/fujoshi, y, para conseguir más clientes, por ende más dinero (y así ganar el concurso del festival) decidió poner na tienda de Maid café, y ahí estaba Sebastian como uno de los meseros, claro, pasaba por esta humillación con un par más de sus compañeros/amigos de la clase, pero no había nada más humillante que ser un macho bruto cabeza de futbolista vestido de maid.

Lo peor era que el puñetero vestido de mierda le quedaba como anillo en el dedo.

- ¡Te ves preciosa Sebastian! -comentó una de las chicas que lo tomo por la cintura y le hizo girar cual princesa, no se estaba burlando para nada, la verdad, las chicas lo estaban disfrutando, ver a los chicos más brutos de la clase en ese tipo de situaciones era... divertido, y un espectáculo que había que presenciar.

- ¡No me jodas, Minna! ¡Esto es estúpido y ridículo y no pienso salir así! -el vestido no le llegaba hasta más de 3 dedos del muslo, podría asegurar que si se agachaba sólo un poco se le podía ver la ropa interior; Joder, tenía que ser una broma.

Sus amigos comenzaron a salir tal cual, valientes y la tienda se abrió, pero Sebastian seguía encerrado en la cocina improvisada de la tienda, gruñendo con morder al primero que le joda por que trabaje.- Seguramente es un mal sueño del que debo despertar en cualquier momento -comentó sentado en el suelo mientras se pellizcaba varias veces el brazo con cara asustada, perturbada y con miedo.

Pronto la presidenta se le apareció y le dejo un bonito adorno conjunto del vestido en la cabeza, y lo sacó a trabajar a empujones.- ¡Si cooperas ganaremos y eso beneficiará a tu club de fútbol! ¡No seas marica! -y tras ello ahí estaba, sirviendo té, galletas y otras cosas moe a parejitas que iban a la tienda, con su mejor cara deformada que intentaba fallidamente ser una sonrisa de cordialidad.

Patético.

Tranquilo, en su banco, rodeado de un par de chicos más, hablando animadamente con ellos, riendo cada tanto. Ese día era el festival, por lo que no tenían clases & justamente en su curso se las había ingeniado para no tener que hacer mucho, por lo que simplemente andaba de vago. En eso llego un chico más corriendo & animado a contar algo.- Oigan, los chicos de 3° grado tienen un Cafe Maind!!- A lo que todos animados se levantaron, no se iban a perder la oportunidad de fastidiarlos.

Al rubio le gustaba la idea, nunca había estado en uno, por lo que era obvio que no dejaría pasar esa oportunidad. Aunque sus demás compañeros se medio rieron por las vestimentas de los menores, el se reía por simple costumbre.

Entre los que estaban ahí atendiendo, uno le pareció familiar. Se lo quedo mirando fijo, en algún lado lo había visto. Lo seguía con la mirada a cada parte que iba, hasta que lo recordó. Prácticamente se levanto de un salto de su lugar, mirando con una sonrisa algo boba el chico.- Oi, Seb!- Saludo alegre, a lo que sus compañeros giraron la vista el pelinegro, como inspeccionándolo.- No tenía idea de que este fuera tu curso.- Rio bajo, acercándose un poco a él.

Ahora que lo miraba mejor & más de cerca el vestido que estaban usando no era nada feo & a decir verdad, le quedaba bastante bien al pelinegro.- Lindo vestido.- Sonrió algo bobo, sin ánimos de burla, diciéndole realmente en serio.- Oi Seb, nos llevarías algo?- Señalo la mesa atrás suyo, con los demás chicos que aún continuaban mirándolo.

La verdad no lo conocía mucho, más que un par de palabras, aunque compartían habitación, nunca habían hablado mucho, ya que cuando estaba uno, quizás el otro no estaba, o dormía, o se bañaba. Así que no le pareció mala idea tratar de acercarse aunque sea un poco más en ese momento.

- Sonríe

Se mordió la lengua e intento hacerlo, pero parecía dar más miedo que nada.- ¿Qué de-de-desea amopghdgjh ? -se golpeo la mejilla con la palma y volvio a morderse la lengua, no sabia si era patético, ridiculo, estúpido, marica, o tonto ahora mismo, hablando así, y vestido así.

La chica que le ayudaba a practicar le hizo una seña de dedito hacia arriba, valorando su esfuerzo y lo sacó nuevamente fuera, donde Sebastian llevaba una bandeja a la mesa número 3, entregando el pedido con la misma sonrisa deforme y tétrica, y tras hacerlo se retiro rápidamente, si tenía suerte se escondería en la cocina de nuevo ahora que el lugar estaba más movidito y no habría tiempo ni nadie con suficiente tiempo de buscarle.

Más no esperó que él estuviese ahí.- ¿Tu? -Alzó una ceja intentando reconocerlo y más pronto que tarde lo hizo, era el rubio con el compartía cuarto.- Nh -frunció hacia él, jamás habían hablado más que un saludo o quizá una despedida, pero esta vez ¿tenía que verle así? Que humillante. Miró hacia donde estaba sus amigos, en la mesa más larga y grande del lugar y se encogió de hombros, su plan se vio frustrado, cuando le iba a mandar a la mierda, la presidenta de la clase le miró desde la cocina haciendole una seña de que sonriese.

Entonces lo intento, deforme y con esfuerzo varonil.- Seguro, iré enseguida -se alejó con el tic en el ojo, en busca de un paño para limpiar esa mesa que anteriormente había sido usada, más en el momento en el que se cruzo con un tipo que estaba comiendo con sus amigos, pudo darse cuenta que este mismo bajo su movil e intento sacarle una foto.. debajo de la falda, aunque fue disimulado, Sebastian tenía tan buenos reflejos que o captó y lo siguiente fue tan rápido que ya tenía al tipo en el suelo con un pie sobre su pecho y el brazo doblado, como si hiciese una llave de lucha libre.-¡ ..serás pervertido, ¿acaso me viste cara de chica? ¿cuerpo de ella, EH? ¿y si te rompo el brazo, qué, puto maricón?! -la amenaza iba incluida con una fuerte presión a su brazo contra su espalda, y aunque el tipo desde su posición podía ver la ropa interior del pelinegro ahora mismo estaba chillando de dolor.

Se volvió hacia la mesa con sus demás amigos & compañeros, pero no dio ni 3 pasos & de repente un griterío se escucho tras su espalda, si no se equivocaba, la voz que estaba gritando era precisamente el pelinegro con el que hacia un momento había estado hablando. Se giro un tanto asustado & sorprendido por tanto alboroto, encontrándose con el menor, dejando contra el suelo a otro chico & sujetándolo del brazo con poca delicadeza.

- O-oi! Sebastian!- No tarde en acercarse a ellos, quitando rápido al ojiverde de encima de la supuesta "victima"; en eso vio a un lado del chico lo que parecía un teléfono & pudo distinguir que tenía puesta la cámara. Hizo una mueca de disgusto. Así que por eso todo ese escándalo. Lo levanto sin cuidado del piso & antes de que hiciera otra cosa, tomó el celular & se lo paso a su compañero de cuarto.- Ya no lo vas a necesita~- Le dijo feliz al dueño del pequeño aparato.

Se acerco un poco al menor, poniendo su mano en su hombro, sonriendole levemente.- Cálmate, o te saldrán arrugas.- Dijo divertido, luego dándole una palmaditas & volver a sentarse en su mesa & esperar a que les llevaran algo de beber & comer. Varios de los que estaban ahí le comentaron cosas como "¡Nos arruinaste el espectáculo!" o "¡Me iba a pasar esa foto!", a lo que el rubio solo respondía con su típica sonrisa & risa, mientra se rascaba la nuca algo apenado por quitarle la "diversión" a los demás.

Si bien prácticamente no había hablado con el chico, era su compañero de habitación & no podía quedarse viendo como lo molestaban de esa manera, más si reaccionaba de aquella forma tan molesta.

Que imprudente ¿le importaba acaso? - ¿Qué crees que estás haciendo tu? -espetó con una mueca de desagrado y recibió el móvil de pura reacción.- ¿Uh? -parpadeó con sus acciones, acaso se creía un héroe? No necesitaba uno, sabía cuidarse por si solo, con o sin un vestido puesto.

A pesar de que Sean le sugirió amablemente que quitara esa cara molesta, no hizo nada más que la deformara en una de vergüenza y quizá mucho más enfado.- Que carajos te importa a ti -y cuando este se volteó pateó al suelo nuevamente al tipo de manera violenta, eliminó la fotografía que le sacó y botando el móvil al suelo, lo piso hasta hacerlo pedazos.- Te veo de nuevo por aquí y te mato, ¿me oíste? ¡TE MATO! -para ese momento el rubio no estaría para defenderlo, por lo que le amenazó claramente. El tipo no hizo nada más que lloriquear por su móvil y salir de ahí corriendo.

-Tsk -Aunque la presidenta se le acercó, pidiendo explicación y, regañándolo por su violento comportamiento Sebastian tenía en la cabeza la idea de quitarse ese mugroso vestido e irse de ahí, lo que menos toleraba era a los maricones, y ahora mismo parecía uno, y no uno cualquiera, si no que un travestido. Tras una pequeña charla con ella calmo sus nervios y salió con una bandeja en dirección a la mesa del rubio, limpió la mesa (cabe destacar que al agacharse más de alguien de otras mesas de agachaba también para echar un vistazo debajo de la falda del otro), y se aclaró la garganta con rostro serio, ahora un poco más tranquilo.- Tomaré la orden -pero nada amable, ni el "amo" ni las sonrisas cute estaban ahora.

Se estaba acomodando en su silla, cuando volvió a oír los grito por parte del otro, otra vez, sonriendo algo nervioso al escuchar la amenaza de muerte. No lo conocía mucho, más bien nada, pero por lo visto, no tenía mucha paciencia & por lo visto era bastante violento, aunque pensó que tal vez era por el hecho de que estaba usando ese vestido que no dejaba mucho a la imaginación cuando se inclinaba mucho o algo así.

Volvió a distraerse, hablando ahora tranquilamente con sus compañeros de algún tema random, riéndose cada tanto & de ves en cuando mirando a otro lado, buscando al pelinegro. En eso su mirada se cruzo con la de una chica, sentada junto con otras, que no paraban de hablar entre ellas mientra miraban hacia su mesa. El rubio solo les sonrió de esa forma encantadora que sabía hacer, haciendo que las chicas rieran encantadas.- Miren, Sean esta ligando otra vez!- Uno de los chicos que estaba a su lado lo codeo divertido, al ver como le sonreía a las jovencitas.

-Ahahaha...- Se paso una mano por la nuca sonriendo, mirando de reojo a las chicas.- Claro que--..- Ahora su atención se concentro en el chico frente a ellos que les estaba pidiendo su orden. Sean le sonrió tranquilo.- Hey Seb, ¿Ya te calmaste?- Recargo sus brazos sobre la mesa, mirándolo fijo, como concentrado solo en él.- Tráenos algo de pastel &... yo quiero chocolate caliente.- Giro su vista hacia los demás, dándoles a entender que pidieran cada uno lo que quería ya que el no era psíquico (?).

Así que era un ligón. Alzó una ceja frente al rubio, era atractivo y parecía buen tipo aunque tenía cara de idiota. Recordó escuchar de él de una de las porristas de su equipo de fútbol, era uno de os casanovas de la escuela, y el que aspiraba a Jefe de los Cavallone, cursando el cuarto grado. Su primer encuentro fue en el cuarto, se decepcionó de no poder compartir un cuarto con una chica, cosa demasiado obvia, por lo que no se quejo, tanto así que no se dirigieron palabra alguna más que saludos o despedidas, quizá una mirada, a decir verdad poco y nada le veía en el cuarto, teniendo tanto entrenamiento y durmiendo lo que dormía, ni tiempo tenía de hacer vida social con él, y no es que la quisiera, pero en un momento se preguntó porque es que no se hablaban si vivían en el mismo cuarto.

Al salir de su letargo con la voz del otro comenzó a escribir en el block de notas que tenía en la mano derecha, ya que escribía con la zurda, y tomó la orden de todos los demás idiotas que acompañaban al rey idiota, Sean.- Enseguida -gruño en un gesto que intentó ser sonrisa y amenazó a todos con la mirada de mil demonios por si otro intentaba pasarse de listo/pervertido, y tratarlo como una chica. Se dio la vuelta y se fue a la cocina a dar el pedido, insinuando quitarse el adorno en su cabeza y el resto del vestido, más la presidenta volvió a tirarle fuera a atender las otras mesas con sus demás amigos/compañeros futbolistas.- ¡No me van a pagar por esto! ¡Exijo un descanso! O al menos una hora de salida -gruño encogiéndose de hombros y apoyándose en una barra masculinamente, mientras platicaba algo random con uno de sus amigos, lo cual por un momento le arrancó una sonrisa.

Mientra anotaba los pedidos, el rubio pasaba su vista del pelinegro a los demás, prestando atención para ambos lados. Soltó una risa por lo bajo en cuanto escucho el gruñidos & "sonrió", pasando ahora su vista a los demás que miraban algo asustados al menor por su encantadora mirada. No es que a el no le halla intimidado o algo parecido, sino que entendía que esa actitud era por tener que vestir de esa forma que, obviamente, no le gustaba en lo más mínimo.

Volvió a distraerse hablando con los demás, algunos comentando lo amenazante que podía ser el ojiverde & otros murmurando sobre las chicas que habían por el lugar. Su giro en cuanto la voz del moreno se hizo escuchar por el lugar una vez más, así que quería un descanso. Una idea paso por su mente. Por unos segundos ignoro a todo mundo & se concentro en verlo sonreír, casi sorprendido de que ese mismo, segundos atrás había estado gritando, golpeando & mirándolos mal.

-Oi, Sean...-Lo llamo uno de sus compañeros, que había notado al rubio bastante distraído. Este solo sonrió & se rió como siempre, disculpándose de forma algo boba & levantándose del lugar & acercándose al pelinegro.

-Oi, Seb!- Le sonrió ampliamente, apoyándose a un lado.- ¿Tienes un descanso?- Se sintió algo idiota de preguntándole aquello después de haberlo escuchado gritando, pero ya qué.- Te parece si la pasamos juntos?- No quería fastidiar, pero ahora tenía curiosidad de conocerlo, después de todo, vivían juntos.

Spoiler:

Apenas se dio la vuelta no tuvo tiempo de reaccionar, por un segundo pensó en girar la cabeza hacia el rubio en su mesa y preguntarse por enésima vez porque es que no se habían hablado jamás de mejor forma si prácticamente vivían juntos, más no calculo que tanto se dio la vuelta que prácticamente chocó su nariz con la contraria, quien estaba demasiado cerca de si ¿en que puto momento ese tipo llegó aquí tan rápido?, o mejor que eso ¿le estaba ligando? Esperaba estar siendo exagerado, porque no quería ligar con un chico precisamente, por muy... hechizante que fuese.. esa sonrisa; Sacudió su cabeza en una mueca alarmado.

¿En qué estaba pensando?

- ¿Acaso tu también quieres de lo mismo que le dí al otro pervertido? -amenazó con la mirada fiera, levantó un puño y acercó al mentón del otro haciendo un movimiento para que moviese este mismo a un lado o quizá hacia arriba, como si jugara, suave, pero le amenazaba y estaba serio. Ahora que lo notaba, le arrancaba casi 5 c.m el muy desgraciado.- Si estás jugandome una broma, no es graciosa, y el hecho de que seas de cuarto no te hace hacer lo que quieras con los de otros grados -Ya había visto como muchos de cuarto se aprovechaban de las chicas de los demás grados, para, inventando excusas de su rango, ligarlas o más bien, obligarlas a ligar con ellos, y hasta había escuchado cosas peores, relacionadas con sexo y violaciones, después de todo, era una escuela de mafiosos, y no tenía miedo alguno.

Su puño esta vez se fue de brazo a su pecho y lo movió a un lado, avanzando a la cocina.- Si tengo descanso lo usaré para quitarme esta porquería y escapar, no para que un idiota con cara de bobo me trate como una chica -gruño con mala cara y tomó el pedido de los chicos de Sean, regresando a la mesa y repartiendo las bebidas y demases en la misma.

¿Qué se a creído?... Cavallone, ya sabia como eran de ligones, los rumores no eran mentira al final.

Spoiler:

Miro algo confundido, sin terminar de entender porque le decía aquello ¿Acaso creía que intentaba algo con él? Claro, que se veía bastante encantador con ese vestido & adorno en su cabeza & esa actitud mal humorada le hacía verse, de una forma un tanto retorcida, más adorable a sus ojos; pero su intención no era ligar con él, solo quería poder conocerlo un poco más, ya que aunque ya llevaban un tiempo compartiendo el cuarto, lo cierto era que no se conocían.

Alzó el mentón de forma inconsciente, riendo algo nervioso pero a la vez como siempre lo hacia, no estaba seguro si tomar esa amenaza como algo serio o no.- A-ahaha, te equivocas, no vengo con esas intensiones.- Sonrió tranquilo, intentando justificarse, pero aparentemente el otro no lo dejaría. Le dio paso, recargándose otro poco sobre la barra & en cuanto salio de la cocina lo siguió tranquilo un poco más atrás.

- ¿Traes mi chocolate?- Pregunto bajo & de forma inconsciente, mientras se asomaba por encima de unos de sus hombros, realmente no esperando una respuesta.- Vamos, compartimos cuarto & aún así, no se nada de ti.- Se encogió un poco de hombros, medio sonriendo de lado, esperando poder convencerlo.

Volvió a tomar asiento en su lugar, mirándolo fijo & con una pequeña sonrisa, mientra tomaba su tasa & dejaba ambas manos rodeándola, buscando sentir el calor que emanaba esta.- Anda, ¿qué dices? Si no es ahora, lo volveré a intentar en la habitación.- Le sonrió de cierta forma quizás un tanto molesta. A lo que, por ese comentario, los demás chicos de la mesa miraron al rubio confundidos & pasaron su vista al pelinegro, malinterpretando ya la situación, & tratando de corroborar con eso si estaban bien en lo que habían entendido.

No es que lo malinterpretara.. ahora, porque desde el principio lo hizo, y hasta que el otro le confirmó que no era así que, respondió con un rostro incrédulo, mentando el madrazo que le iba a dar.- Aquí esta tu maldito chocolate amo de mierda -bufó dejandole la taza sin brusquedad delante de él y sirviendo lo demás, sin usar palabrotas pero si miradas que te podían hacer temblar.

Este rubio le estaba fastidiando más de lo que podía fastidiarle alguien y no sabía porque, o qué lo motivaba a hacerlo, más si era necesario sacarle la mierda como anteriormente había hecho con el tipo del móvil y las fotitos, lo haría. Abrió la boca para hablar con el ceño fruncido pero al momento de ver las caras descolocadas por las palabras del rubio que obviamente eran malinterpretadas, se le contagio la vergüenza y la malinterpretación de la mismas, por ello, le golpeó la cabeza con la bandeja donde había traído la comida y lo demás.- ¡Te mato, cabrón! ¡No me jodas!

¿Qué le pasaba? No podía entender a los tipos amistosos hasta el cielo ni su comportamiento que era fácil de malinterpretar, ¿acaso no tenían cerebro? Se devolvió a la cocina y ya harto del temita del trabajo y todo, y aunque fue detenido empujó a quien fuera se metiera en su camino.- ¡ESTOY HARTO! ¡NO SOY UNA CHICA Y PREFIERO MI EQUIPO DE FÚTBOL POBRE PERO NO HUMILLADO! ¡Chicos, vamonos de aquí! -El equipo se sonrió entre si y le siguió sin dudarlo, aventando bandejas y revolucionándose por completo.

Con las propinas se fueron al cuarto de uno del grupo, pidieron pizza y se quedaron en ropa interior sin el chingon vestido de maid hasta más o menos las 12 de la noche, y ya cuando todos querían beber, Seb estaba muriéndose de sueño.- Me invitan a la próxima, tengo que descansar -aunque muchos se burlaron de él y le aventaron su vestido, no le quedo de otra que ponerse al menos la faldita, y sin vergüenza de mostrar su pecho y cargando los zapatos y lo demás se fue arrastrando los pies a su cuarto.

Estar con el estomago lleno y sueño no era una buena combinación, se ponía muy manso.

Hizo una mueca de dolor & se quejo de forna, un tanto infantil, mientras llevaba sus manos a la cabeza & se sobaba la zona golpeada por el menor. Mientra se preguntaba porque había hecho semejante cosa, si no había hecho nada malo, por lo menos no que el se haya dado cuenta, volvió a sonreír de forma leve, viendo como el otro se alejaba. Su sonrisa se ensancho un poco. Definitivamente lo volvería a intentar en la habitación.

Sus demás compañeros le llamaron la atención, viendo lo distraído que estaba, se limito a reír como siempre & volver su atención a ellos. Claro que en el momento que vieron a todo el equipo de futbol salir gritando & haciendo a un lado a quien les tapara la puerta, su atención se fue directa a ellos, preguntándose que había pasado. Ahora había un nuevo tema en la mesa sobre esos chicos, aunque la verdad al rubio no le interesaba, a menos que alguien supiera a donde había ido, el tema no era de su interés, aún así, trataba de prestar algo de atención & participar un poco en la conversación.

Finalmente salieron del lugar & aprovechando que ese era el ultimo día de la semana, & al día siguiente no tenían clases, algunos propusieron salir a algún lado a beber & comer algo, la mayoría habían aceptado & aunque le insistieron al rubio para que también los acompañara este se negó, con alguna excusa bastante tonta la verdad, pero con la que los demás dejaron de insistir.

Se lleva una leve frustración al llegar al cuarto & ver que no estaba su compañero, no le dio mucha importancia, ya que tarde o temprano debía de llegar. Se cambio de ropa, por una más cómoda, pantalones & remera algo sueltos. Se sentó frente a la televisión que había en el cuarto, la encendió, junto con la consola de Play, eligió algún juego random, busco algunas frituras para comer de sus cajones & se dispuso a jugar un rato, un buen rato.

Realmente no tenía idea de cuanto tiempo llevaba jugando ya, solo sabía que iba por el nivel 40 o 50 & algo, ya ni atención a eso estaba prestando. Se había acomodado con una almohada en el suelo, estaba de cabeza, comiendo cada tanto algo, sin despegar demasiado la mirada de la pantalla. No hasta que vio que la puerta de entrada se abría. Se quedo mirando un momento, viendo al moreno "vestido" de una forma un tanto curiosa. Trago la comida que le quedaba en la boca.- Ahaha, llegas tarde... & estas cansado.- Comento hasta divertido, CASI como burlándose, pero más bien era el producto de estar tanto tiempo frente a la pantalla.

Ahora que lo pensaba un poco, su comentario no había sido precisamente el mejor.

Spoiler:

La falda del uniforme de maid si que le hacia ver ridículo, más estando con ella y el pecho descubierto, parecía un vil travesti que se fue de la cama de su amante antes de acabar; de ello se dio cuenta al verse en un vidrio que distanciaba el internado del patio.- ... -frunció con asco y se rascó el abdomen con la misma pereza con la que salió de la casa de uno de sus jugadores de fútbol.- esto no volverá a ocurrir -sentenció al darse la vuelta y por fin llegar a su cuarto.

Antes de abrir la puerta se quedo sosteniendo la perilla, había algo que le invadió el estomago y luego la cara, no supo desifrar que era pero podía suponer que involucraba aquella escena en la que conoció a su compañero de cuarto, del cual no habían hablado jamás palabra alguna más que monosilavos triviales.

Sábado en la noche; Seguramente estaba de salida con su grupo de amigos sin duda. Se encogió de hombros aliviado, entraría, tomaría una ducha y se iría a la cama, no lo vería hasta mañana ya despierto y con energías.

Al entrar se encontró con el rubio sentado en el suelo con una facha hogareña, jugando videojuegos en su lado del cuarto..

Genial.

Desvió la mirada en forma de rechazo y pasó frente a él para llegar al baño, no sin antes aventar la ropa y lo que traía en las manos sobre su cama, arrastrando un par de toallas y sus pantuflas al lugar, ¿no debería estar en la fiesta con sus amigos? ¿qué hacía aquí? Joder que molesto.

Por un momento se sintió como un dibujo, de eso que pasan por la televisión, que se volvía piedra al sentirse tan ignorado. Rio algo nervioso, ya que era obvio que el menor aún seguía molesto por lo de esa tarde, no estaba seguro por qué & presentía que si llegaba a preguntarle el motivo de su enojo... se enojaría más.

...

- ¿Qué te ocurre Seb? ¿Estas molesto?- Pregunto como idiota si nada, mientras se acercaba un poco a la puerta del baño, recargándose en la pared a un lado de esta. Sí, él en verdad podía ser un idiota a veces, pero aún así se llevaba bien con todos, ¿No podía llevarse bien con el pelinegro también?

Acerco un poco su oido a la puerta, tratando de escuchar algo.- No me digas que estuvieron bebiendo & ahora te sientes mal, no es eso, ¿Verdad?- Alzo una ceja mientras esperaba una respuesta, no es como si el nunca bebiera, pero siendo compañeros de cuarto & él el mayor, sentía algo de responsabilidad de cuidarlo si se encontraba mal.

Se volvió a su antiguo lugar en el piso a esperar a que saliera del baño, para intentar, una vez más, tener algún tipo de conversación con él, no se iba a rendir tan facil, no le gustaba joder, pero Sebastian se le había hecho, curiosamente divertido después de esa tarde en café.

- ¡¿Me ves ebrio, estúpido?! ¡No me hables como si me conocieras! Además es tarde ¿no deberías estar tu con tus amigos? -bramo desde el baño fastidiado.- O simplemente morirte por ahí -murmuró entre dientes fastidiado, como era posible que el muy idiota fuese tan interesado, no sabía que lo motivaba a tal, en su vida habían hablado y ahora el rubio se veía muy amistoso, de un día para otro.

No será que...

Imposible. Tendría demasiada mala suerte si un gay resultase ser su compañero de habitación, y peor, que haya quedado "algo" después de haberle visto con ese horrendo vestido de maid. Que paranoico se había puesto, pensó.

Terminó de bañarse y salió con unos pantalones de tela sueltos y la toalla en los hombros mientras continuaba secando su pelo. Llegó a su cama y en ningún momento vio al rubio ni verifico si seguía en el cuarto.

No tenía nada contra los gays, le daba absolutamente lo mismo su existencia; Más cuando se metían con él... era un problema. Suspiró encogiéndose de hombros y fue a su closet por una camiseta limpia para poder dormir como Dios manda, lo necesitaba.

Sostenía entre sus manos el mando de la Play, mientras escuchaba como el pelinegro gritaba un montón de cosas, de las cuales solo entendió "estar con tus amigos", lo cual supuso que era una especie pregunta, se sorprendió un poco, no pensó que al otro fuera a interesarle lo que hiciera o no.- La verdad no tenía ganas de salir, así que preferí volverme & quedarme aquí tranquilo.- Saco la lengua de un lado de su boca, mientras a su vez, se movía junto con el control & apretaba varios botones.

Alzo la vista en cuanto vio que la puerta del baño se abría & pensó en abalanzarse sobre él otra vez, pero su mirada se volvió rápido a la pantalla frene a el.- ¿Ya te sientes mejor?- Pregunto con una leve sonrisa en sus labios, sin mirarle, aún moviéndose un poco junto con el control.

Segundos después ya había logrado subir de nivel otra vez, por lo que decidió dejar el juego por un rato. Tomo el paquete de papas fritas que aún quedaba con vida & se tiro en su cama, viendo al menor.- ¿Sabes?... Me haces acordar a alguien, pero no estoy seguro...- Se lo quedo mirando un poco más con cierta torpeza, comenzando a ladear un tanto su cabeza, como si con eso pudiera descifrarlo.

Detuvo lo que estaba haciendo por dos segundos, en una mueca ¿era eso una explicación? No se conocían, no tenía que darle una explicación ¡no se la había pedido!- Como si me importara -gruño de mala gana y terminó con el quehacer de su pijama; una polera ligera de color rojo y un short celeste muy corto e igual de ligero.

Mañana era domingo, por lo que tomó su despertador de que en las mañanas de todos los días de la semana salía a hacer ejercicio a las 7 de la mañana y regresaba a bañarse y luego se iba a clases, en aquel intertanto, jamás se vieron. Se aseguró de programarlo para que no funcionase mañana y se quedase a dormir hasta tarde, estaba cansado después del númerito maid del festival, ahora mismo, no queria saber nada del exterior por todo un día, por ello, también apagó el celular.

- Así que eres el tipo de idiota que se preocupa por los demás -alzó una ceja hacia él después de hacerle la pregunta, y no respondió más que alzando los hombros.

Se botó en la cama de la misma manera que él, mirando hacia el techo, vaya que había estado rica esa ducha, ahora sólo tenía que dormir. Al escuchar al otro hizo una mueca de enfado, que fastidio, aunque quizá y algo de curiosidad le dió aquello- ¿Alguien? -se llevó una mano a la cabeza frunciendo ligeramente- Tch.. no me gustaría encontrar a alguien parecido a mi por aqui.. no en esta vida -le miro un momento para que lo entendiese con su seria mirada y luego se metio abajo de las sabanas de espaldas al otro- Apagas la luz.

Se quedo callado un momento, rascándose la cabeza con una sonrisa algo frustrada, ¿Por qué no le agradaba? Es decir, sabía que no le iba a agradar a todo el mundo, pero acaso ¿Había hecho o dicho algo malo? Estaba seguro que no, de momento solo podía seguir intentando.

- En cuanto sepa a quien, te diré.- Sonrió al tiempo que apagaba la luz, por lo que el otro aunque quisiera, no lo hubiera visto. Se acomodo entre las sabanas & se quito la remera, tirándola por ahí, como siempre hacia. Se quedo en silencio durante un rato, aún sin intenciones de dormirse, mientras miraba al techo, hasta que una idea paso por su mente.

-Seb?... Seb, estas dormido?... Seb?- Miraba de reojo cada tanto, para ver si veía algún movimiento por parte del otro como respuesta.- ¿Qué tal si mañana hacemos algo? Tienes el día libre o no?- No perdía nada con intentarlo, más que le diga un No.

Se removió en su cama, mientras esperaba que le respondiera.- Seb, duermes?...- No quería molestarlo & hacer que se terminara enojando más, así que antes quería saber si estaba durmiendo o no. (?)

Realmente no tenía ningun interés de saber si se parecía a alguien o no, aquel comentario había sido sólo por contestarle, todo le daba igual, se creía superior y era lo importante.

Era mejor en todo, deportes, estudios, esfuerzo y ..era atractivo, el se creía su cuento; Así que aquel que se le pareciese, seria inferior al original, o al menos así queria llamarle.

Se encogió un poco en sus frazadas cuando su cuerpo se entibió solo y comenzó a quedarse dormido; estaba exahusto, ese maldito maid café le sacó todas las energías que tenía, más aun con esos zapatos altos que las chicas le obligaron a usar, ¿cómo una chica puede estar con ellos tanto tiempo y sin quejarse? Quizá sus pies eran más pequeños, porque harto que dolían al quitarse los puñeteros zapatos de tacón, ni dar una buena patada a la pelota fastiaba tanto.

El sonido del otro hablando le despertó, más no entendió claramente lo que dijo, ya estaba medio dormido por lo que fruncio y se dio la vuelta hasta la mitad, hacia el rubio- Nh.. ¿qué? -se rascó un ojo y bostezo abriendo la boca sin pudor, la luz estaba apagada, no podía ver ni su cara ni lo despeinado o dormido que se veía, por lo que no le importó abrir la boca y verlo algo bobalicon.

Seguramente para cuando Sean repitiese sus preguntas, Sebastian ya se quedaría dormido profundamente.

Miro atento hacia lo que parecía ser su compañero girándose hacia él, rio un poco.- Entonces si estas despierto! Bien...- Pensó un segundo, recordando sus palabras.- Mañana hagamos algo juntos, te parece? Después de todo, tienes el día libre ¿No?- Sonrió de forma bastante encantadora, como siempre solía hacer con la gente que le agradaba.

Aunque si se lo replanteaba un momento, aún no conocía bien al chico, no sabía si le iba a agradar o no, pero tenía cierto presentimiento, por lo que no le importo sonreír de aquella forma, además, en todo caso, con toda esa oscuridad el pelinegro probablemente no lo vería.

Acomodo sus brazos tras su nuca, mirando sonriente hacia el techo, esperando que le respondiera.- ¿& bien? ¿Qué te parece mi idea?- Lo miro de reojo sin cambiar su expresión, realmente tenía ganas de poder conocerlo mejor, más aún ya que era su compañero de cuarto & nunca habían cruzado palabra. Todo lo que sabía era que estaba en 3 grado & era bastante gruñón, además de eso, nada.

Se despertó con la voz alzada del otro y recién le entendió, gruño arisco y le dio la espalda por completo de nuevo, no tenía interés de hacerse más amigos, menos de ese idiota Cavallone ligón que de por sí ya había tenido una impresión de él al verle con vestido de maid.

- No molestes, no tengo intenciones de ser tu amigo ni nada como esogh- -tuvo que taparse la boca para reprimir un bostezo y acurrucarse en su cama de forma más cómoda para él, casi abrazando la almohada en el proceso, estaba esperando poder dormir hasta la hora que se le antojase- Además, mañana estoy ocupado, no fastidies -mintió, la verdad mañana no tenía ni entrenamiento ni nada, pero lo que menos queria era salir con un chico como si fuesen los mejores amigos del mundo, de hecho, ni con sus compañeros del fut lo hacía.

Hizo una pequeña mueca al escuchar su respuesta, sintiéndose algo frustrado de que el pelinegro este ocupado al día siguiente. Se quedo pensando en alguna forma de solucionarlo, aunque tampoco quería ser tan pesado insistiendo, es solo que realmente tenía ganas de conocerlo, más aún si compartían habitación & en su vida se habían hablado.

Se acomodo entre sus sabanas, igual dándole la espalda, esperando dormirse mientras pensaba alguna idea para poder salir con él a algún lado o aunque sea pasar un rato juntos, pero debía admitir que el menor no se veía muy interesada en siquiera hablar con él, & no sabía el por qué, estaba seguro que no había dicho nada malo o eso pensaba & esperaba.

En algún momento, termino por quedarse profundamente dormido, abrazando por completo su almohada con brazos & piernas, como si su vida dependiera de ella & no debía soltarse. Debía admitir que estaba algo cansado, jugar videojuegos hasta tarde, el café de esa tarde & estar con sus compañeros lo habían dejado algo cansado, por lo que no daba señales de despertarse muy temprano la mañana siguiente.

Habían cosas estúpidas en este mundo y podía jurar que su sueño no era tan pesado (por lo que considero que pudieron haberlo drogado, y ese era el porque no se quedo un sábado en fiesta con sus amigos y se fue a dormir como todo un nerd). Para cuando despertó estaba amarrado con su trajecito de maid de nuevo, en lo que, ya sabia era la sala de porquería donde había trabajado el día anterior para el festival que hoy finalizaba.- ¡A LA MIERDA! ¿QUÉ DEMON-?

Minna fue la primera en aparecer y le desató los pies.- Hohoho si que sirvió drogar las cervezas -comentó con maldad.- Vale no, es broma, ve, tus amiguitos del fut estan de lo más bien trabajando -tuvo que agarrar a Sebastian de la rosita que tenía en el cuello para que viese por la ventana de la cocina a sus amigos tranquilamente trabajando.

- Me niego, no puedes obligarme!

- Sebastian, tus amigos aceptaron por el simple hecho de que les prometí que las porristas les darían...una noche que olvidarían -movió las cejas y el ojiverde se sonrojo frunciendo, desconfiado.

- Y son idiotas por creerte, es obvio que ninguna de ellas aceptaría acostarse con alguno de ellos, tienen cabeza de futbolista y lo sabes.

Entre discusiones la chica aseguró que todas las porristas eran nada más y nada menos que fans solamente de Sebastian y que todas y cada una querían una noche con él, a pesar de que él, no le creyó a la chica, termino trabajando con sus amigos porque.. claro, nadie deja a sus dudes haciendo todo el trabajo, y menos si eres el capitán de tu equipo.

- Va a ser un día largo -murmuro con molestia intentando bajarse el vestido que ya lo sentía mas corto que ayer, sirviendo todo el té y las galletitas que le pedían.

Vale que lo único que valía la pena aquí era la propina.

No era muy tarde cuando se levanto, no faltaba mucho para el medio día, pero aún era temprano como para comer algo además del desayuno. Miro a la cama de Seb, viendo un bulto importante que supuso que era él aún durmiendo, así que tomo algo de ropa, una toalla & se metió al baño dispuesto a bañarse.

Salio ya limpio, secándose el pelo & mirando por un momento la cama del menor, con las sabanas desordenadas & vacía.- Que raro... ya no esta.- Le pareció algo raro ya que no había rastro de que se hubiera cambiado o algo, pero supuso que salió apurado a algún lado & no le importo.

Tomo un par de cosas & salio del cuarto, no iba a ningún lado en particular, iba más en busca de hacer algo, a ver si encontraba algo que hacer. Por un momento su rostro se ilumino, vio el cartel del "Café Maid" que decía que ese mismo día también estaría abierto. No tardo ni 5 min en llegar & sentarse por ahí, mirando a todos lados, esperando si veía al pelinegro, mientras esperaba que alguien lo atendiera.

Volvió rápido su vista, llamándole la atención el que intentaba bajarse más la falda. Rio bajo, realmente era un chico agradable ¿no?- ¡Oi Seb! ¿Me traes algo?- Le sonrió con esa sonrisa idiota que tenía pero encantadora a la vez & mientras lo saludaba con una mano. Ahora entendía porque le había dicho que no la noche anterior.