Nuevo casting rol: Superbi Squalo

Ítem 1: Interrogatorio

1°) Desde el interior de una única puerta aparece Luce, la dulce líder de los arcobalenos, e invita amablemente al recién llegado a ingresar a la sala de interrogatorios. –Vienes al casting? ¡Adelante, no tengas miedo!- Y con una acogedora sonrisa lo atrae hacia el interior; un cuarto cerrado con solo dos sillas y un foco. La anfitriona toma asiento frente al postulante y le ofrece galletas. -Bueno, comencemos… ¿Puedes decirme tu nombre y tu edad, por favor?-.

Podía ser un asesino, un bruto y por sobretodo atarantadotosco, pero seguía siendo un caballero y aquélla era una dama, de modo que esperó su recepción para hacer ingreso al cuarto. Tomó asiento con desgana... ¿Qué clase de trabajo ridículo era ese?. Ante el ofrecimiento de galletas, cual troglodita cogió tres y las engullo como quien no se ha alimentado en días. -¿Y para qué mierda quieren saber mi nombre? Se supone que cotaré cabezas, no firmaré papeles...-. Además, era una ridiculez, esa mujer bien debía saber quien era -Soy Squalo, Superbi Squalo-.

2°) Entra a la habitación una jovencita de grandes ojos brillantes y uniforme colegial, quien rápidamente toma asiento donde le corresponde. -¡Ok, entonces ahora es el turno de Haru!– Se animó a si misma al comenzar con lo suyo. Sonriendo amplio comenzó a revisar sus tarjetitas de ideas -Veamos... esta no... esta va para después...- hasta que finalmente logra encontrar la indicada -¡Bien! ¡Aquí está! Haru quiere saber qué cargo ocupa usted en su familia. Seguro es algo super important desu!-.

Primero lo entrevistaba una señora, y ahora una mocosa. Comenzaba a preguntarse si había ido a la entrevista correcta, observando con ansiosa sospecha hacia ambos lados... ninguna pista. Gruño por lo bajo y se limitó a la pregunta; después de todo, la niña tenía razón, era un cargo importante. -Soy el comandante estratega de Varia; me ocupo de las redadas y del trabajo en terreno-. Rápido y conciso, esa niña no tendría porqué requerir mas información.

3°) Ingresa en silencio y con las manos en los bolsillos Gokudera Hayato, y carraspea al sentarse con una pierna sobre la otra de manera informal -Con esa actitud seguramente das vergüenza a tu familia-. Se cruza de brazos con gesto rudo sobre su pecho -Y como la mano derecha del Décimo, te exijo que me expliques cuál es tu relación con la familia Vongola… ¡Y más te vale que no sean malas intenciones o te las verás conmigo!-.

Con una enorme vena saltando desde su cien por escuchar la sarta de ridiculeces que ese pendejo estúpido le largó, con un solo golpe le aventó la silla encima. -¡VROOOOOOI! ¡¿Quien mierda te crees, mocoso hijo de puta?!-. Acto seguido escupió de forma desafiante hacia un costado del susdicho antes de proseguir -¡Me cago en tí, en tu basura de jefe, y en toda su puta familia de maricas lameculos!-.

4°) Ingresa a la sala de interrogaciones el arcobaleno de la lluvia, toma asiento frente al entrevistado y comienza a estudiar cada movimiento del mismo, sin perder de vista ningún detalle. Hecho aquello, decide levantarse y encararlo sin acercarse demasiado. –Me gustaría saber qué tipo de actividades realizas, kora— Preguntó serio, terminando de cruzarse de brazos. —Lo sabes, normalmente ustedes le llaman 'hobbies', kora-.

Ya, esta porquería comenzaba a sacarle de quicio... -¿Qué tanto miras, eh?-. Ahora preguntaban por sus 'hobbies', como si fuera un concurso de modelaje y tuviera que decir 'yo añoro la paz mundial y mis medidas son 90-60-90'. Enervó una ceja con ambos brazos cruzados a la altura del pecho y respondió finalmente -La espada. Es lo único y mas importante en mi vida-.

5°) Y finalmente para concluir el interrogatorio fue el turno del jefe de Varia para dar la última pregunta. Xanxus entró de manera desinteresada, y aguardó a que tanto Lussuria como Levi a Than se acercaran cargando su sillón encuerado; y una vez lo hubieron depositado correctamente en la sala, sólo recién tomó asiento. Comenzó entonces a escudriñar con la mirada a su ya muy conocida víctima. -Mas te vale que me sepas responder, escoria- sentenció con desinterés viendo la hoja de la preguntas, -En fin, dime tu jodida actividad de batalla y si eres bueno en ella. No me molestaría acabar contigo en este instante y largarme, asi que sorpréndeme-.

-Esto tiene que ser una broma... muy mala- Musitó para sí mismo cuando vio todo el maquinaje de su jefe y sus colegas para que el parásito por fin pudiera sentarse hacer UNA PUTA pregunta. -¡Vroooi! ¡¿De que mierda va a todo esto?! ¡¿Y por qué me preguntas eso como si no lo supieras?!-. Estaba sulfurando, en primer lugar por la osadía del otro al suponer que podría llegar y derrotarlo como si nada, y en segundo lugar por su arrogancia con ese "sorprendeme". -Que te sorprenda una puta, cabrón de mierda. Yo me largo de esta pocilga y tu te vienes conmigo, que tenemos trabajo pendiente-, y dicho aquello, agarró a su jefe por la muñeca izquierda, comenzando a arrastrarlo hacia la salida a tiempo en que profería maldiciones en voz baja.


Ítem 2: Narración de una escena electiva.

Opción 3: Es el día de tu cumpleaños [situados en contexto TYL] y comienzas a pasear de forma solitaria por las calles de una ciudad nocturna. Recorres tu vida en cada pensamiento. Los momentos más importantes; los mejores y peores recuerdos... ¿Qué eventos y a qué personas tienes en mente?


La noche en Sicilia por los períodos de marzo era tan fría como podía ser la mente de un asesino. Incluso más; si no te arrimabas a una hoguera, el hielo se colaba por tus huesos y no te dejaba en paz, ni siquiera con la piel de animal se podía quitar. Y aquella noche llovía, qué mejor panorama para andar melancólico que pasearse bajo la tranquila lluvia.

Lo extrañaba, debía ser honesto. Y por supuesto, por muy ridículo que pudiera parecer, le hubiese gustado pasar esa noche en su compañía, pero se encontraba hacía días fuera de Italia por un viaje impostergable para acordar con la escuadra Rusa.

Vivió siendo basureado por el mayor, con el título de "escoria suprema" encima de la cabeza, casi como si las letras le pesaran escritas sobre la frente. Hizo una mueca divertida al recordar lo encarnizada que fue la primera paliza que se dieron cuando en el instituto el otro osó llamarle así. Cuando aun ni siquiera podía ver la vorágine de vivencias que compartiría en compañía del moreno.

Recordó entonces cuando el noveno vóngola le hubiera congelado, en aquél desastroso momento. Desde aquél día hubo generado casi una dependencia enfermiza hacia su jefe, necesitaba verlo, aunque fuera de reojo cuando se encontraban peleados.
Lo necesitó incluso cuando este no pudo moverse... y cuando por fin logró bañar su piel con el sol del exterior, comprobando cuánto había crecido su albino cabello por él, su propia ansiedad se acrecentó: no podía soportar apartarse del mismo por demasiadas horas, o algo se comprimía en su pecho. Debía protegerlo a costa de su vida si era necesario, y el otro no tenía que enterarse por ningún motivo.

Y ambos seguían matando, seguían exponiendo sus vidas, seguían acumulando heridas y golpes en la carne, seguían oliendo sangre en los húmedos y putrefactos callejones lúgubres de Italia, seguían condenándose al infierno por atrocidades de las que el mundo jamás podría enterarse.
La idea de "morir" no estaba en su diccionario; si uno tardaba en volver el otro lo insultaba, si uno era derrotado el otro se burlaba, pero siempre retornaban al mismo lugar a basurearse. A su hogar.

"LAMECULOS"
xDDDDDDDDDDDDDDD
Lo leí y me encanta, te sale perfecto ser una escoria odiosa y grosera <3
Pero tuviste compasión conmigo, me parece muy bien.

Ortografía: 10/10
Redacción: 10/10
IC: 10/10.

Aprobada, obvio.

'yo añoro la paz mundial y mis medidas son 90-60-90' Jajajajajaja betch!!!!

Ortografía: 10/10
Redacción: 10/10
IC: 10/10.

¡¡¡Es como leer al tiburón!!!

APROBADO